Cómo limpiar superficies de cristal de forma ¡rápida y eficaz!

José Manuel Peñalver Romero José Manuel Peñalver Romero
Hilton, Versat Versat Modern dining room
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Limpiar los cristales y espejos de la casa siempre ha sido una tarea un tanto molesta, ya que muchas veces te pasas un largo rato tratando de dejar esas superficies completamente aseadas, pero después te das cuenta de que el trabajo no ha sido tan efectivo. Mesas, muebles de entrada, puertas de vitrinas, por no hablar de la cristalería de copas, vasos y platos. Sin olvidar el cuarto de baño, donde la mampara o el lavabo de cristal acumulan tanta cal que de un día para otro parece que han pasado eses sin pasar un paño o una bayeta. Además, si no te tomas el tiempo necesario para limpiar el vidrio es posible que se vean rayones y manchas. El objetivo de este artículo de homify es que puedas seguir algunos consejos caseros para limpiar todo tipo de superficies de cristal y dejarlas relucientes.

Utiliza los trapos adecuados

Para limpiar lo mejor es usar trapos. Hay dos clases de trapos muy eficaces, los trapos de micro-fibra  limpian bien la superficie del cristal y los trapos para limpiar los muebles de madera. Estos también sirven para dejar el cristal limpio de manera uniforme. Manténgase alejado de las toallas de algodón, ya que dejan pelusa y no lograra dejar los cristales limpios como usted lo desea. Un truco muy eficaz, es limpiar los cristales con periódicos, los periódicos viejos harán maravillas en sus cristales dejándolos brillantes y limpios, y es una manera de reciclar los papeles viejos.

Agua caliente y jabón: la receta más sencilla

Los adornos de vidrio y cristal pueden ser limpiados sumergiéndolos en agua caliente jabonosa, si sus dimensiones lo permiten. Luego, sólo se enjuagan con agua caliente y se dejan secar, o se secan con un paño limpio que no deje pelusas. Si fuesen objetos de grandes dimensiones, podemos limpiarlos con un trapo humedecido en una mezcla en partes iguales de agua y alcohol, y luego repasarlos con un paño seco y limpio.

La clave es la limpieza a diario

Como con cualquier otra tarea de limpieza, el realizarla a diario o con la frecuencia adecuada garantiza el mantenimiento de cualquier superficie, y con aquellos muebles que tienen un valor especial merece la pena hacer el esfuerzo. No hay que esperar a que exista una mancha o un desperfecto, el mantenimiento requiere disciplina y constancia pero sin duda el resultado es más que brillante. Nunca mejor dicho.

La magia del vinagre

Para ahorrar en productos de limpieza puedes utilizar una receta casera muy sorprendente: se trata de mezclar una taza de alcohol, una taza de agua y una cucharada de vinagre. El vinagre y el amoniaco nunca se deben mezclar, pero si se pueden utilizar por separado. El amoniaco como producto único en el cristal es muy eficaz para desempañar. También puedes optar por un poco de agua caliente y jabón como hemos visto antes, enjuagas el cristal con agua para eliminar restos de jabón y para darle brillo se le añade un poco de vinagre al agua. Y así, tus cristales relucirán brillantes y perfectos.

Un truco para sacarle brillo al cristal

Tan fácil como elaborar una mezcla con sal, bicarbonato sódico y agua caliente. Y frotar con ella cualquier superficie de vidrio que desees abrillantar. Y si quieres refinar el trabajo realizado, vuelve al agua con vinagre como toque final. Si no te intimida el cristal, te recomendamos entrar en Viva la transparencia, y disfruta conviviendo con el vidrio en su máxima expresión.

La guerra contra la cal

Los remedios caseros más efectivos contra la cal son el vinagre blanco y el limón. Mucho más que los productos de limpieza que se venden para este fin. Con el limón y el vinagre, los restos de cal desaparecen casi instantáneamente, al contrario que ocurre con los productos químicos antical, con los que necesitas insistir y frotar un buen rato. Lo ideal sería tener siempre una bayeta o trapo a mano para secar el agua que chorrea por la mampara cada vez que usamos la ducha. Si esto es demasiado para ti, seca al menos la puerta de cristal o plástico cada pocos días. Los cristales se limpian muy bien vaporizando vinagre blanco en spray.

Un brillo sostenido

Los objetos de vidrio como jarrones, ceniceros o botellas podemos mantenerlos brillantes de una manera muy sencilla. Tan solo debemos ayudarnos de un ingrediente en la cocina tan esencial como es el vinagre. En un barreño adecuado añade vinagre y deja los objetos que quiere limpiar sumergidos en el vinagre unos 20 ó 30 minutos. Ponemos una bayeta en el fondo para que las piezas no se rompan al chocar entre ellas. Después, con un cepillo, frota suavemente para eliminar mejor las manchas. También podemos usar este truco en el lavavajillas, añadiendo al lavado una taza o vaso de vinagre. Los vasos y jarras de cristal quedan opacos por el uso. Para disimular las manchas, mezcla agua con maicena y frótalos con una gamuza suave. 

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