Divorcio: ¿ y ahora qué?

Mariana Belisario Blaksley Mariana Belisario Blaksley
homify Living room
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Una vez que la separación se ha vuelto inevitable, las consideraciones prácticas son a menudo las más dolorosas y tediosas. Redecorar tu casa después del evento no tiene que ser una de ellas. Pensemos en positivo y enfoquémonos en disfrutar de nuestra recién ganada libertad en lugar de sufrir por la soledad y llevemos ese estado de ánimo a casa. 

¿No es liberador poder tomar decisiones con absoluta autonomía? Finalmente podemos comprar ese sillón o adorno que nos tenía obsesionados y que sabíamos que nunca pasaría por el filtro de nuestra ex pareja. Es una situación en la que vamos a aprender de a poco a volver a campar por nuestros respetos. Dedicarnos a que nuestra casa refleje nuevamente nuestra identidad y los cambios por los que hemos pasado, es una terapia por sí sola. 

Queremos acompañarles en este viaje de redescubrimiento y darles algunas ideas. Una vez que sintamos que nuestra casa está en sintonía con nuestro nuevo estatus, que todos los recuerdos tristes se fueron dentro de las cajas que se llevó el camión de la mudanza, vamos a estar listos para empezar desde cero con renovados bríos.

Aceptación y un plan de acción

Primero que nada la aceptación, después el plan de acción. ¿Ya nos deshicimos de todas esas cosas que secretamente nunca nos gustaron, que no elegimos y que simulamos aceptar por las buenas? Fuera lo viejo y bienvenido lo nuevo. Ahora vamos a planear las muchas maneras de hacer que nuestra casa sea eso: sólo nuestra

Podemos llamar a un equipo de diseñadores que nos ayude en la tarea o poner manos a la obra por nuestra cuenta, va a depender de la magnitud de los cambios que decidamos encarar. También hay que pensar en nuestros hijos, si los hay, y dejarles hacer contribuciones que les hagan entender cómo funciona la nueva dinámica familiar y que siguen siendo parte de todo.  

¿Nos quedamos? A recuperar nuestra casa

¿Siempre envidiamos la home office que se armó nuestra ex pareja en aquel cuartito? Recuperemos terreno y vamos a convertirla en un espacio para nosotros: una nueva oficina, un gimnasio o un vestidor de lujo. Si les gustó la última opción, acá van a encontrar mucha inspiración.

Hagamos el ejercicio no sólo de recordar cuáles eran las cosas que nos encantaban antes de estar en pareja, nuestro color favorito, un artista especial, un estilo decorativo. Ahora conjuguemos todo eso con las cosas que fuimos descubriendo y nos fueron llamando la atención estos últimos años, no por influencia de nuestras pareja sino porque genuinamente nos gustaron. 

¿Nos mudamos? Hay que saber elegir

Ser quien deja la casa familiar tiene sus ventajas. La sensación de empezar a escribir o pintar una hoja en blanco después de un evento duro en nuestras vidas puede ser una experiencia maravillosa. Sin duda es más fácil romper con el pasado y hacer borrón y cuenta nueva, pero ese estado de ánimo también nos puede llevar a cometer errores.

Si hay hijos, estos deben ser una parte integral en la elección de la nueva vivienda, no podemos saltar directamente al departamento de soltero o soltera sin tenerlos en cuenta. En este caso es importante buscar una ubicación cercana que nos resulte conveniente a todos.

Por otro lado para las parejas sin hijos, un cambio total de escenario es lo mejor. Es una gran oportunidad para explorar distintas áreas de la ciudad o aprovechar para mudarnos más cerca del trabajo

Recuerdos que nos hagan sentir bien

Rebusquemos en esas cajas que están en casa de mamá u olvidadas en algún placard o sótano. Fotos de las épocas previas a la vida en pareja, adornos y todo tipo de memorabilia que trajimos de viajes anteriores a la luna de miel o vacaciones familiares están de vuelta. 

También es el momento de salir a buscar aventuras que se convertirán en nuestros próximos recuerdos, así que si les gusta esta foto deberían echarle un vistazo a todas las cosas lindas que tienen en Wallart Argentina

En estos momentos sentirnos libres de elegir lo que queramos sin tener que consultarlo con nadie nos hará darnos cuenta de que todo en esta vida tiene su lado bueno. 

Incorporar elementos que nos definan

Es el momento de dejar volar la imaginación y conectarnos con nuestro costado más caprichoso. Colores audaces en las paredes, vinilos, luces extravagantes, objetos locos, cuadros o esculturas, saquémonos las ganas de experimentar. ¿Quién nos va a decir que no?

Estos momentos son definitorios y una de las mejores cosas de este tipo de cambios es que probablemente nos miraremos al espejo un tiempo después y nos daremos cuenta de que ya no nos tomamos a nosotros mismos tan en serio. Es una gran lección y podemos reflejarla haciendo que nuestra casa sea un lugar más divertido. Tanta seriedad no tiene lugar en nuestra nueva vida y nos sacaremos años de encima conectándonos con cosas que nos lleven de vuelta a la infancia y a épocas más simples. 

El espacio de los chicos en la nueva casa

Uno de los aspectos más dolorosos de un divorcio es saber que los chicos tendrán que ser parte del proceso. Por supuesto que es mejor que tengan dos casas donde estén en armonía y no una sola plagada de malos ratos y peleas. La rutina de ir de una casa a otra resulta dura, agotadora y también desconcertante para nuestros hijos y una forma de hacerla más liviana es que tengan un espacio que sientan suyo en la casa nueva.

Planear el nuevo dormitorio con ellos los distraerá de la separación y les hará sentir ilusión por las cosas nuevas que van a tener, amén de que vendrán a dormir más contentos y con ganas de pasarla bien en su nuevo lugar. Si tenés el espacio agrega más camas, tus hijos querrán venir alguna vez con sus amigos a dormir. 

¡Mucha suerte en la nueva etapa!

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